NO CAMBIO EL CARIÑO POR NADA
Son días de tantos altibajos, ¿verdad? En todas las casas florece la ausencia de los que se han ido.
La música, en mi, desata las emociones y lloro, liberando así todo la nostalgia que he ido reteniendo, sin darme cuenta.
Luego sonrío, porqué siento que todo encierra un lado bueno, lleno de belleza, muy amoroso.
El dolor más desgarrador, guarda la esencia del amor más profundo. No cambio el cariño dado y recibido por nada.
No me resisto a sentir lo que siento, al contrario, me entrego a lo que surja porque todo es vida, aunque duela.
Y me gusta imaginar que el plan es perfecto, que en cada momento el Universo me ofrece las herramientas que necesito.
Y me gusta imaginar que los que han cruzado están bien, que me sonríen y me recuerdan que solo se han ido un poco antes.
Y me gusta imaginar que nos abrazamos y este abrazo me reconforta tanto que me une a ti, a todos. Me une con los que estamos aquí para sentir la fuerza y la dulzura que nos mantiene con los pies en la tierra, para apoyarnos. Con los que han partido para constatar que el amor continúa.
La vida es un misterio y el amor es la contraseña que nos permite transitarla con ternura
Deja un comentario