CRUZAR EL ABISMO

 

ABISMOCierro los ojos y me veo ante el abismo de mis primeros tiempos de duelo, cuando el dolor y el desespero, como la niebla espesa, lo envolvían todo.
El horror de despertar por las mañanas y recordar que no, que no había sido una pesadilla que era verdad, que Ignasi había muerto… Estaba atrapada, como en “El día de la marmota” en el infierno. Entonces, ese abismo profundo que me separaba de la vida parecía insalvable.

 

 

Ahora me parece un sueño estar al otro lado. El otro día leí que el duelo es el tiempo que nos concede el Universo para aprender a amar sin apegos. Para darnos cuenta que el amor va más allá de lo que llamamos muerte, que siempre suma y está fuera del tiempo y del espacio.

 

¿Pero cómo dar el salto? Para eso he tenido que mirar en mi interior, en silencio y con la ayuda de buenos terapeutas para desprenderme de muchas corazas, de muchas capas de miedo. El miedo tiene mil formas y a veces aparece como una adicción al sufrimiento, a ver el lado malo de todo o de todos, de sumirse en la queja o la critica constante. Otras se disfraza de una exagerada preocupación por los demás, de un estar pendiente de las personas que queremos hasta casi dejarlas sin aire, sin espacio, sin libertad, de estar siempre dando hasta el agotamiento lo que creemos que los demás esperan de nosotros. El miedo tiene muchas caras y siempre encierra un dolor oculto.

 

 

abraçadesEl amor, en cambio, ese amor en mayúsculas del que hablo nunca duele, siempre tiene una palabra dulce, una mirada de ternura que nos reconforta. Brota de dentro a medida que vamos aligerando el peso de siglos de creencias y ataduras y es lo único que llena el vacío de las ausencias.

 

Hace 17 años que murió mi hijo y durante este tiempo he ido descubriendo miles de regalos que él me ha ido dejando. Por ejemplo, ahora sé que mi miedo es mío y no guarda relación con su muerte, ni con nada externo. Cuando aparece, aunque asustada, sé que puedo mirarle a la cara. Despacio me acerco y lo acaricio hasta que se desvanece.

 

 

 

6 Responses to CRUZAR EL ABISMO

  • Marcela Ramos dijo:

    Querida Merce. Gracias por este blog, ha traído consuelo a mi vida. Hace 6 meses exactos he perdido a mi hijo Martín. El dejó este plano terrenal casi de 4 años y como todos los que comentamos aquí en tu sitio, pasar por la muerte de un hijo es lo peor de la vida, nadie puede considerar que sea a uno el que le este pasando. Fueron casi 4 años hermosos de ese regalo…desde que se fue la he pasado muy mal muy triste…me consumo en el trabajo…pero muchas veces no encuentro el sentido a la vida. Soy creyente y no niego haber reñido con Dios por haber llamado a Martín, apenas en el inicio de su existencia. Durante año y medio enfrentamos la lucha contra el maldito cancer, pero finalmente Martín gano su sanidad en el cielo. Ya no esta aquí y el tiempo para el reenuentro parece inagotable…así que simplemente continuo con esta realidad que es mas pesada que mi existencia….creo que es parte normal de ese duelo y un día espero ver el peor suceso de mi vida de esa manera tan sabia, así como tu lo comprendiste. Al igual que tu también inicie un blog…solo que lo hice muy temprano…solo al mes de su partida…y eso hace que tenga ese tinte de dolor puro…y solo lo había compartido con personas cercanas…pero hoy en memoria de mi hijo quiero abrirlo a mas personas compartiendo el enlace aquí en tu sitio

    http://juanmartinnavarro.wixsite.com/enmemoriademartin/blog

    Gracias Merce en muchos días oscuros de estos seis meses, tus mensajes han dejado un tibio rayo de luz. Quisiera poder escribirte al correo alguna vez….

    • Marcela Ramos dijo:

      Si quisieras visitar el blog y dejar un saludo sería muy valioso para mi. Apenas le agregamos la caja de comentarios. Un abrazo fraternal

    • Mercè Castro dijo:

      Un abrazo Marcela,

      El duelo es personal e intransferible, pero agarrarse al amor, a la ternura hacia uno mismo nos va bien a todos. Ten paciencia, el camino es más o menos largo, generalmente más lago que corto, porque la muerte de un hijo es muy desgarradora y abre heridas anteriores. Escribir va bien, compartir sentimientos ayuda.

  • M@ Alejandra nuñez pinto dijo:

    Como enfrento la vida si acaba de fallecer mi hijo de 12 años lo vi nacer y me toco cerrar sus ojos porque señor porque .?

    • Mercè Castro dijo:

      El camino es muy doloroso Alejandra, pero con paciencia y mucho amor es posible atravesarlo. Pide ayuda especializada, participa en grupos de duelo… haz todo lo que pueda ayudarte, aunque solo sea un poquito. Ahora estás en un periodo de pura supervivencia, todo lo que te de algo de energía aprovéchalo.

      Yo he realizado muchas terapias, en este blog está reflejado parte de mi camino y en los dos libros que he escrito.

      Imparto sesiones individuales y en grupo de crecimiento para atravesar el duelo,

      Un abrazo inmenso

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Contador
Visitas
MIS LIBROS
Volver a Vivir

Clicar en la imagen

Clicar en la imagen.

Clicar en la imagen